Toledo atesora en sus murallas un patrimonio sin igual, un legado que nos ha sido dado y tenemos el deber de conservar y honrar como se merece. En este artículo conoceremos uno de esos edificios que combinan riqueza patrimonial, belleza artística y también su dosis de misterio.
¿Por qué se mando construir san Juan de los Reyes?
Su origen tiene un motivo político, la victoria de la batalla de Toro, donde se afianza como reina de Castilla Isabel la Católica, frente a su opositora Juana la beltraneja. Además este edificio franciscano pretende ser el mausoleo de los Reyes Católicos para que sus cuerpos descansaran eternamente, cosa que finalmente no ocurrió, ya que el peso de Granada como hito final de la Reconquista, jugó ventaja en detrimento a la ciudad de Toledo.
Arte toledano: estilo y arquitectura del monasterio
San Juan de los reyes fue concebido por el arquitecto Juan Guas, primer maestro de obras que tuvo el título de arquitecto, masón operativo, comprendiendo esto último como creador en arquitectura de una serie de valores que iban más allá de su propia geometría, concibiendo el monumento como alegoría del hombre, distinguiendo cuerpo y alma. Así san Juan de los Reyes nos propone un juego constante de símbolos donde encontramos la creación, el paraíso, las tentaciones y el infierno; estados y realidades del alma que confluyen en un viaje iniciático de belleza artística incomparable. De estilo gótico flamígero, su técnica recuerda latitudes europeas de influencias flamencas y francesas, aunque también se deja ver la huella del mudéjar toledano en partes como el claustro alto.
Avatares históricos
Este monasterio franciscano, ejercerá de espacio fúnebre en ocasiones especiales, como lo fueron las exequias que recibió la emperatriz Isabel de Portugal en 1539. En 1808, sufre un incendio provocado por las tropas francesas durante la guerra de la Independencia, perdiendo una importante biblioteca que poseía. También fue víctima de la desamortización de Mendizábal, obligando a la exclaustración de los monjes. Posteriormente fue museo provincial y más tarde se reconstruye con criterio recreaconista por el arquitecto Artúro Mélida, creando como anexo una nueva edificación de estilo gótico mudéjar, que será sede de la escuela de Artes y Oficios de Toledo.
Composición del espacio y simbología
Se compone de iglesia de una sola nave con capillas adyacentes, dos claustros de los cuales sólo nos queda uno con dos alturas, sala refectorio y dependencias para la comunidad franciscana. Pero lo que más sorprende al viajero, es que una vez que se entra en el templo, a uno le inunda una sensación realmente especial, mágica, sabe que es un lugar fabricado a conciencia con el lenguaje del símbolo, y casi aturdido por la profusión de elementos, puede observar todo un catálogo seres fantásticos que en su conjunto son un bestiario de lo más pintoresco: elementos vegetales retorcidos que van jugando con las formas más variopintas de animales, seres monstruosos, quimeras, centauros, grifos, arpías, unicornios, escenas grotescas, satíricas, y en fin, una hilera interminable de criaturas sacadas de la imaginación más rica que uno se pueda imaginar.
Además en este claustro bajo, podemos ver cómo las ventanas que dan al hermoso patio interior, están decoradas con estatuas de santos que nos dan la clave hagiográfica del lugar. Si esto es ya de por sí es espectacular, al acceder al claustro alto, disfrutaremos de un artesonado mudéjar con elementos heráldicos de los Reyes Católicos, arcos con el lema “tanto monta” y quizás lo más curioso, una colección de veinte gárgolas que adorna las voladuras del tejado con animales, humanos y seres de pesadilla, otorgando el toque final que remata este edifico que en sí mismo, es una gran obra de arte.
Son muchos, muchos los elementos para descubrir y describir con detalle san Juan de los Reyes, por ello hemos diseñado una ruta exclusiva que se empapa del sentido que contiene un lugar que nos aguarda para conectar también con su misterio.